28 noviembre 2012

Bye bye timidez!

¿Quién no ha pasado alguna vez por una etapa de timidez a lo largo de su vida? Incluso, después de haberla superado, a veces puede volver debido a circunstancias adversas a uno mismo. En mi caso me duró bastantes años y, cada vez que lo recuerdo, no puedo evitar pensar "¡pero cómo pude ser tan tonta!"


La timidez es una enfermedad mental en la que nos escudamos para dejar de hacer cosas: "no voy a hablar en público por si se ríen de mí", "no voy a proponerle nada por si me dice que no", "me da vergüenza pedirle el número de teléfono", etc. Y así un sinfín de situaciones que no hacemos por miedo a... ¿A QUÉ? Esa es mi pregunta. El "no voy a hacer tal cosa por si esto otro" acaba condicionando tu vida y siendo dueño de tu existir. Te conviertes en un preso de tu propia celda. Y, con el tiempo, ese 'por si' se acaba conviertendo en '¿y si?'. Y es lo peor que te puede pasar. En la vida hay que cometer errores. Pero si nunca haces nada por miedo a cometerlos, estás cometiendo ya el MAYOR ERROR DE TU VIDA. ¿No resulta paradójico? Huyes de algo que ya te ha alcanzado. Nunca te quedes con la duda de qué hubiera pasado si lo hubieras intentado. Arriésgate. Es el único camino para ganar.

"Te conviertes en un preso de
tu propia celda"

Cuando eres una persona tímida, de repente parece que todo el mundo desborda seguridad en sí mismo. Pero hasta el mejor orador político se pone nervioso cuando sale a exponer un discurso y no puede evitar preguntarse si lo estará haciendo bien. La diferencia entre él y tú es que tú estás sentada en el asiento de la esquina de la última fila sin hacer nada y él está subido en una tarima ante miles de ojos que le observan. La valentía no es no tener miedo, sino que, aún teníendolo, haces acopio de fuerzas y sales a enfrentarte a ello. Esa es una de las claves del éxito.

"La valentía no es no tener miedo, sino que, teniéndolo,
haces acopio de fuerzas para enfrentarte a ello."

SÍNTOMAS QUE TE DELATAN:
  • Te ruborizas a todo momento deseando desaparecer
  • Eres incapaz de mirar al otro a los ojos por miedo a que descubran tu personalidad.
  • No puedes parar de pensar lo fea y torpe que eres.
  • Te alejas de todo contacto humano y rezas por que nadie te hable.
  • No dejas de mover las manos o tocarte un mechón de pelo que apaciguan tu nerviosismo.
  • El corazón parece que va a salirse del pecho.
  • A veces sientes ganas de llorar pero no hay ningún motivo aparante por el que estar triste.
El primer paso para dejar de lado la timidez y decirle 'bye bye' es tener muy claro la imagen que tienes de ti y modificarla. Esa imagen se ha ido conformando a lo largo de los años a través de diversos factores: la familia, los profesores, tus amigos, la sociedad, los medios de comunicación y tu propia experiencia. Tienes que saber que la timidez no es una cosa innata y que solo depende de ti el hecho de que la superes. Es más fácil de lo que piensas. La perspectiva cambia desde el punto donte te sitúes en la habitación. Y una buena perspectiva es la clave de la felicidad. Esto es como un dominó, y la primera pieza eres tú mismo. Cuando tú estás bien, el resto de las piezas también funcionarán y te ayudarán a alcanzar las metas. Para sentirse bien con los demás, primero hay que sentirse bien con uno mismo.

"Una buena perspectiva es la clave
de la felicidad"

No se trata de cambiar tu forma de ser, sino de corregirla. Tu esencia es lo mejor de ti, no lo olvides nunca. Pero a veces la esencia hay que saber canalizarla, como un diamante en bruto que desea ser pulido. Sigue siendo diamante, pero le hemos limado las asperezas. Tampoco se trata de querer imitar a nadie. Por ser como los demás, renunciamos a tres cuartas partes de nosotros mismos. De este modo, la transformación comienza por pequeños detalles. Párate a pensar en lo que haces y dices y trata de orientar la brújula siempre hacia el norte. Me explico:


                      NO                                                        SÍ
                         No puedo hacerlo                                    Voy a por todas
                      Me da miedo                                              ¿Y qué?
                                           Voy a hacer el rídiculo               Eso no lo sé, y tampoco sería el fin  del mundo
             Demasiado bueno para mí                                 Lo merezco

Arriésgate siempre, pero con paso firme. Si dudas te tambalearás y podrás caerte. Sé positivo, una mente positiva es capaz de alcanzar grandes metas. Proponte cosas. Si no te propones nada, nunca conseguirás nada. No tengas miedo de ser tú mismo. La autenticidad es un don muy valorado en un mundo donde sobran clones. Asume tu humanidad, pues siempre habrá momentos de flaqueza o de fracaso, pero asumir esa condición es la clave para buscar soluciones y superar los obstáculos. Un 'no' no es sinónimo de una puerta cerrada, sino de que tienes que seguir caminando para abrir una ventana. No estás solo. El ser humano no es un ente aislado y necesita de los demás para alcanzar sus objetivos. No busques la felicidad como un todo completo. La felicidad es una línea discontinua que se abastece de los pequeños detalles. Ser ambicioso y querer ser más no hay que confundirlo con vivir con la constante envidia de querer algo que no te corresponde y que te acabará frustrando. Cada uno es como es. No cambies por nada, pero intenta siempre mejorar en lo que puedas. Y, ante todo...


 SÉ DUEÑO DE TI MISMO


 ¿Te digo un secreto? Somos libres. No dejes que la timidez coarte tu libertad.


*Andrea*
@prepyus

3 comentarios:

  1. Muy buen post!! Me ha recordado a mis años de adolescencia. Que malos tiempos aquellos. Y... Quién me ha visto y quien me ve!

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  2. Tienes toda la razón del mundo Andre! Y sino que te lo digan a ti, quién te ha visto y quién te ve!! Ahora te comes el mundo sin proponertelo :p un besito grande ns vemos mañana y me cuentas novedades de ya sabes jjeje

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  3. ''por ser como los demas renunciamos a 3/4 partes de nosotros mismos'' qué gran verdad AUTENTICIDAD

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